Fermento que contiene probióticos, microorganismos está hecho con nódulos llamados tíbicos, un cultivo de bacterias benéficas y levaduras capaces de generar distintas especies de pre y probióticos sin necesidad de lácteos o productos de origen animal, por lo cual es un producto reconocido entre la comunidad vegana.
Las formulaciones caseras más frecuentes son con piloncillo natural, dátiles y piña. Aunque el límite es la imaginación.
Labacteriafeliz
Según el Chef Alex Von Foersten los tíbicos pueden cultivarse en distintos medios: leche de semillas, agua, infusiones de hierbas, jugo de uva u otras frutas con alto contenido de azúcar. Si se usa agua, se logra una bebida similar a una limonada gasificada. Al utilizar jugo de uva se obtiene una bebida muy similar al champagne.
Beneficios
- Fortalece al sistema digestivo, contribuyendo a la flora intestinal, reduciendo la inflamación gastrointestinal
- Ayuda a mejorar la absorción de nutrientes.
- Estimulan la función de producción, absorción y nutrición de las vitaminas y minerales en el cuerpo, esto es gracias a las bacterias leuconostoc y levaduras sacharomyces
- Desintoxicante natural y aliado en fortalecer el sistema nervioso y digestivo.
- Mejorar el sistema inmune, esto gracias a las bacterias benéficas streptococcus y lactobacillus
¿Cómo prepararlos y consumirlos?
Insumos e ingredientes
Un recipiente de VIDRIO
Una manta de cielo
Colador de plástico (no metal)
Agua, té...
Piloncillo o azúcar
Opcional puedes agregar otro tipo de ingredientes, especias
Para cuidarlos, primero se lavan los búlgaros con una coladera de plástico bajo agua fría de garrafón.
Importantísimo utiizar únicamente utensilios de plástico, vidrio o madera, nunca de metal, así como agua sin cloro.
Una vez limpios se vacían a una jarra o frasco de vidrio y se agrega agua limpia y un piloncillo pequeño o 4 cucharadas de azúcar por porción (una porción equivale a 1 cucharada sopera).
Se cubre el recipiente con una tela de tul o gasa y una liga o listón. Se deja reposar a temperatura ambiente de un día a otro, ojo aquí cambia el tiempo, debes dejar fermentar por 48 horas y colar y tomar el fermentado.
Para beber el kéfir únicamente se cuela. Y después nuevamente se limpian los tíbicos para hacer la siguiente producción.
Para mayor información sobre recetas, cuidados, en la internet existen comunidades que te aconsejan acerca de ello.
Idea de los creativos
Los que han creado bebidas con base en la fermentación del los tíbicos de agua, preparan jugos, extractos con frutas naturales, por lo cual no hace falta añadir ningún endulzante.
En caso de querer hacer segundas fermentaciones con tés, tisanas, deberemos añadir nuevamente un par o tres de cucharadas de azúcar.
¿Dónde los puedes conseguir?
- Pregunta a tus vecinos, alguno de ellos los tiene
- Busca entre los amigos y conocidos de tu red básica
- Si gustas, yo tengo pocos, me encanta regalarlos, si gustas mándame un correo y con mucho gusto te los obsequio.
- También los puedes encontrar en las tiendas naturistas o en la internet.
Contraindicaciones
Deben evitar el consumo de tíbicos:
- Personas con problemas de intestino permeable.
- Personas en tratamiento con inmunosupresores (por trasplantes y enfermedades autoinmunes, como el lupus, la artritis reumatoide o la colitis ulcerosa).
Deben consumir el fermentado de los tíbicos de agua con precaución:
Las personas con intolerancia a la lactosa: dado que en la elaboración del kéfir el contenido en lactosa se reduce considerablemente, las personas con intolerancia a la lactosa pueden consumir kéfir si es leve o moderada, o elegir kéfir elaborado con otros ingredientes distintos de la leche (kéfir de agua, kéfir de coco, etc.).
Las personas con «estómagos sensibles» pueden notar malestar digestivo, hinchazón o diarrea, aunque esto último depende también del tiempo de fermentación del kéfir.
Un kéfir con tiempo de fermentación de menos de 24 horas puede tener un efecto laxante, mientras que con un tiempo de más de 24 horas puede ejercer un ligero efecto astringente.
Referencias
https://tesis.ipn.mx/bitstream/handle/123456789/25012/L%C3%93PEZ%20ROJO%20JUAN%20PABLO.pdf?sequence=4&isAllowed=y
Von Foerster, Alex. (18, diciembre, 2015). Kéfir de leche y agua: diferencias y similitudes. [Blog] Recuperado de https://alimentoyconciencia.com/kefir-de-leche-y-de-agua-diferencias-y-similitudes/
Comentarios
Publicar un comentario
Gracias por compartir.